En cuanto a distintos tipos de suelos se refiere, es conveniente diferenciar según las técnicas que podamos utilizar para realizar un pulido de mármol eficiente. Aunque pertenezcan a un mismo material, existen pavimentos en unas condiciones distintas o con una sensibilidad opuesta. Por ello, aquí podrás saber qué distinciones hemos de llevar a cabo para hacer de cada tarea nuestra una satisfacción para el cliente que nos contrata.

Cabe diferenciar entre las diferentes subcategorías de mármol para entender los tratamientos que podamos dar a unos con respecto a otros.

 

Travertino Romano

Su textura contiene poros y aportan una naturalidad muy exclusiva. Se trata de una superficie con mucha resistencia a agentes climatológicos como la humedad o al desgaste por fricción. Plantea una gran facilidad de cara a su limpieza y además su aspecto confiere suma elegancia. Por ello se trata de un suelo muy preciado.

Macael

Quizá uno de los formatos más artísticos. Podemos encontrarlo en muchos monumentos o edificios de gran patrimonio cultural como por ejemplo el Museo Geominero de España. Un pulido de mármol eficiente en este tipo de superficie maximizará su esplendor estético. Suele presentar tonos blancos o claros.

Carrara

Se trata de un tipo de mármol de inmensa calidad que requiere un mantenimiento cuidadoso y persistente. Para realizar un pulido eficiente de mármol de este tipo es necesario aplicar técnicas de limpieza previas proteccionistas sobre él como, por ejemplo, utilizar jabones suaves o cataplasmas para este tipo de materiales.

 

Todas estas especificaciones en cada clase de superficie indican que para efectuar un pulido eficiente de mármol en cada caso, será necesario conocer las peculiaridades y condiciones que éstos presentan. De este modo, no se dañará bajo ningún concepto el material y el resultado será totalmente satisfactorio para el cliente presentando un trabajo pulcro, brillante y respetuoso con el suelo.