Los suelos de mármol nunca han dejado de ser tendencia en el mundo de la decoración de viviendas. Y es que, pese a su elevado precio, los suelos de este material cuentan con unas características técnicas que no dejan nada que desear. Este tipo de pavimentos son muy comunes en las zonas de cocina o bien en los suelos de los baños. Ya que aportan una sensación de brillantez y amplitud que concuerda perfectamente con las necesidades decorativas de estos espacios.

Un material un tanto frío

También podemos encontrar este tipo de suelos de mármol en toda la superficie de la vivienda. Pero no es algo muy común debido a que normalmente este tipo de material no conduce muy bien el calor y suele encontrarse a temperaturas bastantes frías. Es por ello que solo se suele utilizar para dormitorios, salones y pasillos en apartamentos o casas situadas cerca del mar. Es decir en casas de playa, o en viviendas situadas en zonas muy cálidas donde los inviernos son muy leves. Cuando hablamos del mármol todo el mundo lo relaciona o piensa en que se necesita una manutención exhaustiva para mantener las propiedades del material, como el brillo, pero lo cierto es que los suelos de mármol no necesitan más que otro tipo de suelos, tan solo una limpieza regular y un cuidado un poco más cuidadoso en cuanto a las ralladuras y posibles manchas.

Como comentábamos anteriormente, los suelos de mármol suelen tener un precio bastante elevado debido a las propiedades del material. Pero actualmente son muchas las empresas que están ofreciendo materiales sustitutivos al mármol que ofrecen unas características muy similares a un precio mucho más reducido. Lo cual lo hace mucho más atractivo y más asequible para muchos clientes que quizás no pueden permitirse la compra de un suelo extenso de mármol para sus viviendas.